Paren La Guerra Espiritual, ¡Soy Una Nueva Creacion!
- Mary Lynn Tolar
- 21 abr
- 2 Min. de lectura
Santiago 4:7 (NVI) «Someteos, pues, a Dios. Resistid al diablo y huirá de vosotros».
2 Corintios 5:17 (NVI) «Por tanto, si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas.»
En una conversación reciente con una amiga que ha caminado muchos años con el Señor, se hizo evidente que todavía puede haber confusión en el manejo de esos desagradables dardos encendidos del enemigo sobre pecados pasados y fracasos morales. Ella estaba buscando la escritura exacta y correcta para detener el bombardeo sobre cierto tema. ¿Cómo podía conocer todas las escrituras necesarias para la batalla sobre cada tema? Y cuando se estaba armando para un dardo, parecía que era golpeada con otro tema no relacionado. Se sintió derrotada antes de empezar a contraatacar. ¡No es bueno!
La verdad es que esta es una táctica común de intimidación que el enemigo utiliza a menudo. Si funcionó anteriormente para hacernos ineficaces, la utilizará de nuevo. Entonces, ¿qué hacemos? Podemos desarrollar algunas escrituras «a las que acudir» en nuestro Diario de Oración, como Isaías 26:3 (NVI), «Tú guardarás en completa paz a aquel cuyo pensamiento en ti persevera, porque en ti ha confiado». Pero también hay un versículo que pasamos por alto y que es un fuerte escudo y una veloz espada del Espíritu.
Al practicar Santiago 4:7 (NVI), «Someteos, pues, a Dios. Resistid al diablo y huirá de vosotros», podemos levantar el escudo de oración de la Nueva Identidad que se encuentra en 2 Corintios 5:17 (NVI), “De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas”. Así es, cuando recibimos a Cristo Jesús como nuestro Salvador, fuimos redimidos de esa vieja trampa y esclavitud del pecado. Jesús nos hizo nuevos como lo evidencia nuestro bautismo en agua. Escogimos enterrar nuestra vieja vida con la muerte de Jesús en la cruz. También resucitamos con Él en Su resurrección en una nueva vida, ¡como una nueva creación! (Todo lo que hicimos o dejamos de hacer en el pasado se acabó. Jesús mira hacia adelante, y así debemos hacerlo nosotros, recordándole al enemigo que sabemos que ahora vivimos cambiados.
La sangre de Jesús derramada en la cruz es eficaz y eterna. Refuta toda mentira y todo dardo condenatorio que se cruce en nuestro camino. El amor de Jesús por nosotros nunca falla, así que medita en lo que Jesucristo dice de ti. Levántalo como un eficaz escudo espiritual de fe y pronúncialo para hacer retroceder al enemigo. Puedes ganar la batalla.
Comentários